-Ïîèñê ïî äíåâíèêó

Ïîèñê ñîîáùåíèé â Hinson_Neumann

 -Ïîäïèñêà ïî e-mail

 

 -Ñòàòèñòèêà

Ñòàòèñòèêà LiveInternet.ru: ïîêàçàíî êîëè÷åñòâî õèòîâ è ïîñåòèòåëåé
Ñîçäàí: 23.04.2020
Çàïèñåé:
Êîììåíòàðèåâ:
Íàïèñàíî: 308


300 Euros Para Lograr Cita En La Oficina De Extranjería

Âòîðíèê, 23 Ôåâðàëÿ 2021 ã. 18:27 + â öèòàòíèê

300 Euros Para Conseguir Cita En La Oficina De Extranjería


No se esconde. Su teléfono se puede localizar en Facebook, donde da la dirección de un locutorio en L'Hospitalet de Llobregat. Se presenta como gestor y ofrece un «servicio de administración de citas previas» para tramitar los permisos de extranjería que se cursan en comisarías de Policía Nacional y dos oficinas colapsadas en Barcelona, que prestan sus tareas para toda la provincia. Ahora se tarda entre setenta y cinco y noventa días a atender a los demandantes, pero para tener fecha es imprescindible extraer cita en internet. Y es labor prácticamente imposible. «Parece un sorteo», comparan en las asociaciones de inmigrantes, preocupadas por una dificultad que ha consolidado un mercado informal para burlar el atasco, en el que se venden los resguardos que la administración ofrece sin coste en una web que apenas los despacha.


«No hay citas disponibles para la oficina de Barcelona. Cuando las hay, son 300 euros», tasa el conseguidor contactado por este medio. No es un capricho pretender lo antes posible el tique, un mero formalismo que, al expedirse a cuentagotas en una página del Gobierno, se ha transformado en una posesión codiciada. De procurárselo pronto depende que no venza la documentación que se demanda para que un inmigrante traiga a su familia a España o bien hacerse con una autorización de residencia. El plazo en que expira es de un año o bien incluso menos.


Reunir los informes en el sitio de origen, recibirlos tras unos meses y prepararlos (o traducirlos, de no ser un país hispano) puede suponer un coste de más de 1.000 euros. Además de esto, existen las mordidas que algunos funcionarios de esos países demandan por su cometido, apuntan ciudadanos de Pakistán y Senegal. El esfuerzo, en el que los familiares se implican, se malogra de no concretarse data y hora en Extranjería a tiempo.


«Si no tengo cita y se expiran los papeles, mi familia de Pakistán debe volver a las oficinas y gastarse dinero otra vez», teme A., al que su documentación prescribe a mediados de mayo. abogados para inmigracion La recabó para traerse a su mujer y su hijo de un par de años, que se embarcaron en un viaje de unas 7 horas desde las montañas de Cachemira para recorrer ventanillas en la capital, Islamabad. «Hay que ir a una oficina, a otra, a otra... Es mucho gasto en transporte. Salieron del pueblo la noche antes. Hemos sufrido por estos documentos», acredita.


A. lleva un mes encontrando con el mismo mensaje en el móvil: «En este instante no hay citas disponibles». Para solventarlo, un conseguidor le solicita 400 euros. «Me afirma que me logra cita en una semana. No tengo mucho dinero. Si me cobrase menos, unos 200 euros, lo pediría prestado y lo devolvería poco a poco», conjetura A., que no puede arriesgar alén de finales de febrero para asegurarse una data para aportar los certificados en término. "Sacar cita habría de ser fácil, no tengo por qué gastar mi dinero en ello y podría mandarlo a mi familia para que compre comida, zapatos, medicamentos... abogados para inmigrantes ", cuenta.


Dinero fácil


«Esto abre las puertas a la corrupción y a quien quiere dinero fácil», alerta Tahir Rafi, de la Asociación de Familias Paquistaníes de España, que ruega «una solución» a la Delegación del Gobierno en Cataluña. «Lo que más me duele es que mucha gente trabaja doce horas, cobrando una miseria para sostener a sus familias, y cuando pagan por una cita lo están sacando del pan de sus hijos y el tratamiento de sus madres», queja.


La Delegación responde que «existe una fuerte demanda» para presentarse en las oficinas «y no se puede atender tan rápido como requieren los interesados». Alega que se ha reducido la demora instituyendo desde octubre un sistema alternativo, consistente en mandar la documentación de antemano para entregar cita. Diferentes entrevistados coinciden en que, aparte de mantenerse el retraso, se han rechazado citas a través de esa vía aduciendo motivos que tachan de fútiles, como una resolución inapropiada de los comprobantes que tienen que escanearse para ser remitidos.


"Nos ha pasado a todos los abogados. Cualquier disculpa es válida", cuestiona Quim Clavaguera, del bufete Barna Extranjería Abogados. "Cada vez nos pasa menos, pues miramos los documentos con lupa. He llegado a dedicar media hora para ver si la resolución de un pasaporte es correcta", comenta Clavaguera, que no pesca nuevas citas desde "antes de Navidad". "La última que conseguimos era para dos meses más tarde", indica, y ve que «faltan funcionarios para el volumen de expedientes» que circulan en la provincia de Barcelona.


En la federación latinoamericana Fedelatina aconsejan conectarse los martes y miércoles a las 9.30 horas al sistema de entrega de citas, cuando aseguran que se cuelgan. "Hay quien la ha logrado así, mas se debe atinar en darle al enter en el microsegundo preciso. No debería ser de esta manera, debería facilitarse", postula su presidente, Javier Bonomi, quien sí aprecia que el método adicional con el que la Delegación trata de descongestionar la página web "evita mucho que haya comercio con las citas". En cualquier caso, remarca que los problemas para lograrlas prosiguen siendo la consulta primordial que atienden. "Es tan bastante difícil que nuestra abogada también se queja de que le cuesta sacarlas", corrobora Jossie Rocafort, de la entidad filipina EMAISS.


Ordenadores "superpotentes"


Un joven colombiano, Omar, abonó 90 euros en un local del Raval hace casi un año para adquirir un resguardo. «Si aguardaba, el precio era menor. El más económico en ese momento era de 45 o cincuenta euros», revela. En su caso, le urgía tras no lograr que su visado se renovara. «El chaval me consiguió una cita exactamente el mismo día para un par de semanas después. Fui, tomó una fotografía de mi pasaporte, pidió el dinero y ya estaba», relata.


Omar, senegalés, prefirió no abonar, si bien asegura que hasta la policía le recomendó hacerlo. «La mayoría de los que conozco ha pagado, y ha sido mucho dinero para ellos», constata. Cuenta que procuró denunciarlo mas absolutamente nadie quiso confiarle detalles. «Pagan por el temor a perder la residencia y el trabajo, por el hecho de que para renovar el contrato o bien buscar un empleo te piden una tarjeta de vivienda en vigor. Si los mafiosos saben que lo necesitas de veras, te dan un precio que debes pagar», sostiene.


«El coste va variando, dependiendo de si se saca citas o bien no. Es un mercado en estado puro», afirma un activo miembro de la comunidad paquistaní. Confiesa que conoce «despachos que han contratado a personas que están trabajando con ordenadores superpotentes, dándole de manera continua al enter, reiniciando, quitando cookies, utilizando diferentes navegadores y técnicas de informática y, a la mínima que hay citas libres, las pillan y las sacan como churros».


"Dicen que hacen mucho esmero para conseguir citas y creen que lo justo es cobrar. Desde mi punto de vista, se juega con las necesidades de las personas, y la oficina de Extranjería tiene responsabilidad, porque no pone medios suficientes", opina. La Delegación responde que se han incorporado funcionarios "últimamente" para reforzar el equipo. Agrega que no ha recibido demandas sobre la reventa de tickets.


Conforme a los criterios de




















Ìåòêè:  

 

Äîáàâèòü êîììåíòàðèé:
Òåêñò êîììåíòàðèÿ: ñìàéëèêè

Ïðîâåðêà îðôîãðàôèè: (íàéòè îøèáêè)

Ïðèêðåïèòü êàðòèíêó:

 Ïåðåâîäèòü URL â ññûëêó
 Ïîäïèñàòüñÿ íà êîììåíòàðèè
 Ïîäïèñàòü êàðòèíêó